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sábado, 4 de abril de 2015

SALAR DE ATACAMA: EL GRAN NIDO BLANCO

El Salar de Atacama se encuentra en una depresión formada por los levantamientos de la Cordillera de Los Andes y la Cordillera de Domeyko. El bloque central se hundió y su relieve fue luego cubierto por una capa de material volcánico. Atravéz de los años, este bloque central ya hundido, se forma un depósito de sales que en algunos puntos alcanza los 1450 metros de espesor. Este depósito salino se ha originado por la precipitación de sales y minerales arrastrados desde los cerros por el agua que baja desde la Cordillera hasta esta depresión. En épocas pasadas, en las que hubo mayor humedad, se formaron extensas lagunas superficiales que al evaporar el agua precipitaron sales en el fondo. En periodos mas secos como el actual, estas sales cristalizan en la superficie debido a la evaporación de la salmuera existente en el núcleo del Salar. Este núcleo esta compuesto por halita (NaCl) y se caracteriza por presentar una costra muy rugosa, similar a la que se encuentra en el sector de Soncor. En otros sectores existen otros tipos de costa, algunas de ellas con estructuras exagonales ocasionadas por las fisuras que se producen e la superficie al secarse. El suelo que rodea el Salar de Atacama esta conformado principalmente por material arenoso fino y arcilla. En los sectores mas bajos y cercanos al núcleo del salar se nota una cubierta salina en la superficie. Aqui sobrevive una abundante y diversa vegetacion adaptada a estas diferentes salinidades. Se han registrado 21 especies de flora, de las cuales 13 son hierbas y 8 arbustos. Entre las especies mas comunes están el Cachiyuyo, la Brea, la Grama Salada, el Junquillo, la Rica-Rica y el Pingo-Pingo. Estas dos últimas plantas son usadas por las comunidades originarias con fines medicinales, para tratar problemas en el estomago y en los riñones.
LOS FLAMENCOS En el Salar existe un sistema de lagunas que proporciona sitios de reproducción y alimentación para los flamencos y otras especies de aves. El sector Soncor de la Reserva Nacional Los Flamencos abarca las lagunas Puilar, Burro Muerto, Barros Negros y Chaxa. Estas 3 últimas estan conectadas por el canal Burro Muerto. En estas lagunas se desarrollan formas de vidas adaptadas a condiciones de alta salinidad como las diatomeas (microalgas responsables de la productividad primaria del sistema), artemias, copépodos y dafnias (microinvertebrados), que son el alimento de flamencos y otras aves acuáticas. Algunas lagunas poseen un intenso tinte rojo, causado por una alta concentración de algas unicelulares ricas en pigmentos y que, se cree, contribuyen a las tonalidades rosáceas de los flamencos. Los flamencos se ubican entre los grupos de aves más antiguos que todavia existen. La evidencia de fósiles situa sus origenes a comienzos del Período Cretácico (hace aproximadamente 130 millones de años). Durante mucho tiempo, los flamencos han sido cazados para obtener su carne, sus plumas o sus huevos. La preocupación por la protección y conservación de estas especies tuvo un gran auge en el siglo XX y desde entonces se han logrado grandes e importantes avances. En Chile, las especies están resguardadas en las áreas protegidas que administra la Corporación Nacional Forestal (CONAF). Sin embargo, la tendencia mundial apunta a la necesidad de aplicar un enfoque de ecosistema para su conservación, que incluso puede sobrepasar las fronteras internacionales. Los continuos desplazamientos de los flamencos sudamericanos en el altiplano de Argentina, Bolivia, Chile y Perú plantearon un gran desafio para estos países, los que a mediados de la década del 90 se unieron para realizar censos de aves multinacionales, cubriendo más de 220 humedales altoandinos. La almentación de los flamencos es compleja, ya que requiere la filtración de pequeños crustáceos, moluscos, insectos y microalgas (diatomeas y algas verde-azules) que se encuentran en las aguas de las lagunas salinas. Para ello tienen un pico especialmente adaptado, con una curvatura descendente y filas de lamelas (pequeñas placas que actúan como colador). Al comer, sumergen la cabeza y parte del cuello y llenan su pico de agua para luego expulsarla con la lengua, que es gruesa y esta provista de salientes para retener el alimento. Solo pueden mover su mandibula superior y generalmente no la pueden abrir más de medio centimetro. A menudo se puede ver a las tres especies de flamencos comiendo en la misma laguna, aunque parte de su comportamiento alimenticio varía según la especie. El flamenco Andino y el flamenco de James caminan lentamente y bajan su cabeza, moviendola de un lado a otro, para filtrar el agua con su pico. Mientras, van dejando una huella en su camino. El flamenco chileno tiende a quedarse durante un rato en un solo sitio, pisando fuerte en el fondo de las lagunas, en un movimiento circular, y bajando su pico para filtrar el agua que se mueve con sus patas. De las tres especies de flamencos que se encuentran en Soncor, ésta es la de mayor tamaño y la que más abunda en el Salar de Atacama, donde se le puede observar durante todo el año. Su hábitat se restringe exclusivamente a los humedales altoandinos de Argentina, Bolivia, Chile y Perú. Aunque también anida en otras lagunas del pais, es en el sector Soncor de la Reserva Nacional Los Flamencos donde históricamente ha existido la mayor colonia de nidificación de la especie, con miles de polluelos nacidos y desarrollados exitosamente cada año. El flamenco de James es el mas pequeño de las tres especies que se encuentra en Soncor y la menos abundante. Su rango de distribución cubre humedales altoandinos de Argentina, Bolivia, Chile y Perú, donde se encuentra preferentemente sobre los 4.000 metros. La especie debe su nombre al filántropo inglés Berkeley James, quien en 1850 financió la expedición de Charles Rahmer en la que se capturó el primer ejemplar de su tipo. La falta de registros desde entonces, hizo pensar a los cientificos que se habia extinguido, hasta que el ornitólogo Alfred Johonson la redescubrio en 1957 en Laguna Colorada, Bolivia, donde se encuentra la mayor colonia de nidificación del Flamenco de James. Durante el invierno se puede ver en el sector de Soncor, hasta donde llega para alimentarse cuando las lagunas de altura se congelan.
MAS VIDA Además de las aves acuáticas, en este ecosistema también se encuentran varias especies de mamiferos, reptiles e insectos. El mamifero que se encuentra con mayor frecuencia es el Ratón Oliváceo, un pequeño roedor que originalmente tenía una dieta herbívora, pero que ha adaptado su alimentación al consumo de insectos y otros pequeños organismos. Aunque mas esquivo, aqui también habita el Zorro Andino, que se alimenta principalmente de ratones, lagartijas y, ocacionalmente, aves. Otra vida que tambien encontramos en estas áreas es la Lagartija de Fabián, frecuenta los bordes de las lagunas, utilizando como refugio las grietas en la costra salina, desde donde emerge para capturar los invertebrados asociados a los cuerpos de agua salina. Los insectos mas comunes son el Matapiojos, especialmente especialmente cerca de las lagunas, y la Langosta de Atacama, que abunda en las zonas con vegetación.